Razer paga 1,2 millones de dólares por la publicidad engañosa de sus mascarillas N95 para gamers

A principios de año dábamos a conocer que Razer había sido demandada por mentir con sus mascarillas Zephyr. Y sí, estas mascarillas llegaron como una nueva forma de negocio de la compañía ante la llegada de la pandemia. Ofreciendo así su propia solución, pero con un diseño futurista para los gamers. Este diseño ofrecía un sistema de doble filtro N95 junto a un ventilador para aumentar la entrada de aire, evitando la condensación a la par que te refrescaba la cara. Por no hablar de que incluso ofreció un sistema de iluminación LED RGB.

Como resumen, en abril se terminó que Razer había engañado a sus clientes. En concreto, estas mascarillas no tenían la certificación N95. Por lo que no eran tan seguras para la salud de los consumidores como la compañía prometió. El tiempo ha pasado y ahora conocemos que Razer ha conseguido resolver la demanda interpuesta por la Comisión Federal de Comercio de los Estados Unidos (FTC por sus siglas en inglés). Y sí, para resolverla ha tenido que pagar una multa y obligada a reembolsar el dinero a los compradores.

El engaño de las mascarillas Razer Zephyr le ha costado casi 1,2 millones de dólares a la marca

En concreto, Razer ha pagado una multa de únicamente 100.000 dólares. Pero también tendrá que pagar 1.071.245,33 de dólares en concepto de daños a sus clientes. Este dinero se dividirá en forma de cheques y pagos por PayPal a los 6.764 consumidores que compraron las mascarillas comercializadas de forma engañosa. Dicho de otra forma, todos los compradores recibirán un reembolso completo de su compra.

Dependiendo de lo que hayan comprado, cada comprador recibirá un reembolso de 99,99 dólares por la mascarilla más básica con un juego de tres filtros. Mientras que otros usuarios recibirán un reembolso de 150 dólares por la versión Starter Pack con 33 filtros.

Para tener un contexto, se descubrió que las mascarillas Razer Zephyr vendidas como unas mascarillas "de grado N95 para una máxima protección”, que también estaban registradas por "la FDA y probada en laboratorio para una eficacia de filtración de bacterias del 99 por ciento”, eran un engaño.

Pruebas independientes arrojaron que del 99% prometido, estas mascarillas únicamente arrojaban un 86,3% de efectividad con el ventilador encendido, y un 83,2% con ellos apagados. Estos fueron los mejores resultados, y es que incluso otras pruebas determinaron una cifra de efectividad aún menor. Algo bastante preocupante cuando estas mascarillas se crearon debido a la magnitud de la pandemia.

Uno de los principales motivos de este problema era su diseño. Si bien usaba filtros N95. El diseño fue muy pensado para ser futurista, pero no práctico. A la mayoría de los usuarios no se le ajustaba bien la máscara sobre su rostro. Algo vital para garantizar que todo el aire que se inhale dentro de la mascarilla sea el que haya pasado por los filtros. Para ahorrar costes, las mascarillas Razer Zephyr llegaron en una única talla, por lo que era imposible que se ajustara a la perfección en todos sus compradores. De aquí que no se cumpliera con la protección publicitada.

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