El Govern incorpora 52 educadores sociales para luchar contra el abandono escolar después de la ESO

El Govern prevé incorporar hasta 52 educadores sociales este curso para luchar contra el abandono escolar después de la ESO. Así lo ha avanzado El Periódico y consta en la respuesta del Govern a una pregunta parlamentaria recogida en el boletín oficial del Parlament. La medida plantea hacer seguimiento del alumnado matriculado en cuarto de la ESO que actualmente no está cursando ninguna enseñanza reglada mediante la incorporación de estos profesionales. La implementación de la medida se hará gradualmente durante el primer trimestre de 2025.

Por otro lado, durante el segundo trimestre del curso se pedirá información a los centros educativos sobre el consejo orientador en 4º de la ESO, una solicitud que se hará mediante un aplicativo corporativo. El objetivo es difundir el conocimiento de la oferta formativa entre los orientadores de la secundaria y los tutores, conocer las intenciones del alumnado que acaba la ESO, ajustar la oferta de bachillerato y grado medio y formar a los centros sobre el proceso de orientación hacia los alumnos en el momento de transición hacia la educación postobligatoria.

A finales de octubre, Educación reconoció que había que mejorar la orientación. Lo dijo la consellera Esther Niubó a raíz de datos sobre el abandono de los estudios, ya que transcendió que el 64,7% de alumnado que no tuvo plaza para cursar un grado medio este curso, a pesar de cumplir los requisitos, no ha continuado estudios en el sistema reglado.

En la respuesta escrita del Govern a una pregunta parlamentaria también consta que se está trabajando en la regularización de los centros privados de nuevas oportunidades mediante la publicación conjunta con el Servicio de Ocupación de Cataluña (SOC) de un decreto de nuevas oportunidades.

Despliegue de un plan de bienestar docente

Estas son algunas de las medidas que el Ejecutivo catalán tiene previsto poner en marcha después de que el Grupo Impulsor de Mejoras Educativas presentara un documento con un conjunto de propuestas para mejorar el sistema educativo de Cataluña. El documento, que se realizó tras los malos resultados del informe PISA, abordaba diferentes ámbitos como la lucha contra el abandono escolar, pero también la inclusión, la formación o el bienestar de la comunidad educativa.