Aagesen prepara una nueva estrategia de pobreza energética para "ampliar coberturas"

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, prepara una nueva estrategia de pobreza energética, en la que quiere "ampliar las coberturas" de las ayudas y, en concreto, conseguir que el bono social llegue a todos los hogares que lo necesiten, algo que en estos momentos no se produce, porque hay más potenciales beneficiarios que no lo conocen o no saben cómo tramitarlo. Según la Alianza contra la Pobreza Energética, no acceden a estas ayudas más que al 20% de quienes reúnen las condiciones para recibirlas.

Aagensen ha lanzado estas dos ideas en la reunión que ha mantenido este jueves con representantes de organizaciones del Tercer Sector, que trabajan con población vulnerable, y de consumidores como OCU y FACUA, antes de que la semana que viene el Ministerio lance una consulta pública previa, un primer paso para recoger ideas para la nueva estrategia, que está previsto que pueda aprobarse a finales de este año o principios del que viene. Según varias fuentes, no ha detallado demasiado las ideas que tiene en mente, pero sí ha incidido en la voluntad de establecer un canal de comunicación permanente y de trabajo conjunto con ellas, que es algo que hasta ahora no existía.

Los nuevos términos en los que eventualmente las familias en situación de vulnerabilidad económica puedan acceder a ayudas como el bono social eléctrico y el térmico entroncarán con el final de los descuentos adicionales del bono social para hogares vulnerables y vulnerables severos que se introdujeron en 2023 como un de las medidas para amortiguar la crisis de precios de la energía. El pasado 1 de enero, los porcentajes empezaron a menguar dese el 65% y el 80% que estaban en vigor de forma extraordinaria, de modo que hasta el 31 de marzo, el descuento será del 50% y el 65% respectivamente, el 1 de abril y hasta el 30 de junio volverá a reducirse hasta el 42,5% para los vulnerables y 57,5% para los vulnerable severos segundos y a partir de julio y hasta final de año se reducirá al 35% y 50% respectivamente de manera indefinida. En el encuentro, se le ha reclamado a Aagesen que los descuentos vuelvan a como eran el año pasado, del 65% para hogares vulnerables y 80% para los vulnerables severos.

Eliminar barreras para acceder a las ayudas

En la nueva estrategia también será un elemento importante que las ayudas lleguen a todos los hogares que tengan derecho a ellas, algo que ahora no sucede. "Que ningún hogar que tenga derecho al bono social se quede sin él", ha declarado Aagesen tras una reunión. Según personas presentes y conocedoras de lo que se ha hablando allí, la vicepresidenta no ha dado detalles de qué medidas tomará para ello pero sí se ha mostrado "receptiva" a trabajar para eliminar algunas de las barreras que les han mencionado las organizaciones.

Una de las organizaciones se refieren en concreto a dos. Las primeras, de tipo competencial, porque las ayudas sociales dependen del Gobierno central, pero también de comunidades y ayuntamientos, que no siempre están bien coordinados. A este respecto, Transición Ecológica ha asegurado que "implicará" a sociedad civil, ministerios y comunidades autónomas en la elaboración de la nueva estrategia, en el caso de estas últimas, porque son las responsables de gestionar los servicios sociales.

Por otra parte, quienes trabajan más directamente con personas vulnerables advierten del obstáculo que supone muchas veces la protección de datos, que impide algo tan simple como que puedan cruzarse datos de distintos registros para identificar quién debería beneficiarse del bono social o el térmico, sin que tengan que pedirlo, que es una de las dificultades para personas poco informadas y con pocos medios para hacer estas gestiones.

"Si cruzas los datos, hay menos beneficiarios de las ayudas, de los bonos sociales y térmicos, que personas en situación de vulnerabilidad. Se debe a que hay que hacer trámites y nos gustaría que fuera automático", dicen desde otra de las organizaciones que se ha reunido con Aagesen, que también ha llamado la atención de la vicepresidenta sobre los hogares que durante un determinado periodo necesitan el bono social, después su situación mejora y ya yo y posteriormente vuelven a necesitarlo. En este sentido, la Alianza contra la Pobreza Energética ha reclamado que se recupere el bono específico, con un descuento del 40% en la factura de la luz, que se creó en 2022 para hogares que, sin llegar a los criterios de vulnerabilidad para recibir el bono social, sí necesitaban una ayuda para pagar la luz, así como aplicar un IVA superreducido, del 4%, a la factura eléctrica por lo menos de los hogares vulnerables.

Aagesen no se ha pronunciado en concreto sobre estas propuestas pero las organizaciones consideran que ha mostrado "sintonía" con ellas y les ha reconocido que son ellas las que realmente conocen las dificultades para que lleguen las ayudas energéticas, puesto que trabajando directamente con los hogares que deberían beneficiarse de ellas.

Limitación del bono social para familias numerosas

Lo que no se ha mencionado en la reunión de este jueves es un elemento que prometió hace ya dos años la entonces ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y que tras postergarse en varias ocasiones -coincidiendo con procesos electorales- se dejó la siguiente estrategia contra la pobreza energética a la que Aagesen da ahora el pistoletazo de salida.

Se trata de la introducción de un criterio de renta para el acceso a los bonos social y térmico por parte de las familias numerosas. Ahora es universal para ellas, como se comprobó cuando en marzo de 2023 trascendió que los entonces vicepresidentes de la Comunidad de Madrid y la líder de Más Madrid en a Asamblea y hoy ministra de Sanidad, Enrique Ossorio y Mónica García, también los percibían por el simple hecho de tener cuatro y tres hijos respectivamente, independientemente de sus ingresos, mucho más elevados de los de una familia vulnerable.

El Gobierno central reaccionó anunciando que limitaría el acceso al bono social de las familias numerosas a un determinado nivel de renta pero de momento no se ha tomado ninguna decisión, que en principio, estaría en manos del Ministerio de Transición Ecológica.

La última aproximación a esta cuestión de la que se tiene constancia la hizo la propia Aagesen, cuando siendo aún secretaria de Estado de Energía, dijo en 2023 que se estaba estudiando aplicar a la familias numerosas los mismos criterios de renta que rigen para las que no lo son, pero con una prima a partir del tercer hijo, para elevar el umbral que les permitiría recibir el bono social y térmico.